Un bloque cualquiera de cualquier barrio. Una vivienda colgada en un forjado de hormigón. Así es esta Colmena Tapizada. Un espacio tan degradado como vivo. Un tapiz forrando las paredes desnudas de las vidas despojadas. Un relámpago cultural contra el aburrimiento. Una selección musical de esperanza contra el tedio que provoca el acceso al mundo ilimitado del turbocapitalismo. Un puñetazo en la cara. Una patada en las costillas. Una fiesta interminable. Un punk atracando bancos. Una allnighter que no acaba. Un cóctel molotov prendido volando hacia su objetivo. Un concierto inolvidable. Un volcán que cambia el clima. Una colección de discos para ser compartida.